"Shooting Star" parecía un capítulo más de Glee;
de hecho parecía un episodio que iba a ser malo y de relleno, pero en torno al
minuto 17 todo ha cambiado y "Shooting Star" ha pasado a convertirse
en un capítulo maduro, real, emocionante y uno de los más dramáticos de toda la
serie. Capítulos como este son los que todavía hacen grande a Glee.
El primer cuarto de hora del episodio ha sido raro a más no
poder. Más raro de lo que suele ser Glee quiero decir, ¿Una profecía de
Brittany sobre un meteorito?, ¿Una canción dedicada a un gato?, ¿La entrenador
Beiste declarándose a Will? Nada tenía ni pies ni cabeza...Ya estaba viendo
venir el capítulo de relleno que hasta ahora no había tenido esta cuarta
temporada. Pero no. Todas estas cosas extrañas cobraban sentido unos minutos
después.
La locura del meteorito de Brittany era una excusa para
llamar a todos a que vivieran como si estuvieran en los últimos momentos de su
vida; una llamada a expresar sus sentimientos y a decir a susseres queridos lo
que nunca dicen. A aprovechar cada segundo que tenemos, a eso nos invitaba
Brittany en medio de su locura más grave de lo que normalmente es.
Glee nos estaba engañando; estaba claro que todos íbamos a
pensar en lo absurdo que era dedicar la tarea de la semana del Club a decir a
los seres queridos lo que nunca decimos en lugar de preparar los inminentes
Regionales. De ahí la canción dedicada a Lord Tubbington y la declaración de
Beiste a Mr. Schuester. Yo ya estaba indignándome por dentro al ver estas
absurdeces en la pantalla de mi portátil, pero he tenido que tragarme todos mis
pensamientos después de esos dos disparos.
Dos disparos que han dado un giro de guión completo al
capítulo, y que han cambiado la vida de los alumnos del instituto Mckinley. Han
sido minutos llenos de tensión en los que ha quedado reflejado lo bien que sabe
mostrar la serie temas tan serios como los ataques recientes que ha habido en
institutos norteamericanos.
No recuerdo ahora mismo que un capítulo de Glee fuera tan
emocionante en todos los sentidos, en la incertidumbre constante de no saber
que va a pasar, los chicos despidiéndose de sus familiares e intentando
protegerse los unos a los otros. Brittany aterrorizada en el cuarto de baño,
Will intentando calmarlos a todos, Tina desconsolada fuera del instituto sin
saber que había pasado con sus amigos, Kitty confesando arrepentida a Marley
que había estado saboteándola con su peso corporal. Muchos momentos inolvidables
en este episodio.
Pasada la tensión y una vez con todos a salvo, era de
esperar que la intensidad del capítulo bajara; pero no ha sido así. Todavía nos
quedaba descubrir quien había sido el causante de los disparos. Sue Sylvester
se declara culpable de los hechos y parecían lógicos los argumentos que daba a
sus compañeros y al director; parecía típico de ella tener un arma guardada.
Sin embargo quedaba otro giro de guión: la verdadera culpable había sido Becky.
Emoción al máximo otra vez. A la pobre chica, asustada del futuro que le
esperaba, no se le ha ocurrido otra cosa que coger la pistola de su padre y
llevarla al instituto. El arma se ha disparado sola dos veces y Sue ha decidido
cargar con la culpa para proteger a su alumna más querida. Pelos de punta al
ver esta escena. El personaje de la entrenadora Sylvester es uno de los más
grandes en la serie; se va del instituto, pero se va por la puerta grande.
Veremos qué pasa con ella en los próximos capítulos.
Aparte de la gran trama de esta semana, puntualizar que
Ryder sigue buscando a su misteriosa chica online y al parecer es alguien del
Glee Club, ya que el móvil ha sonado en una de las mochilas de la sala, aunque
no hemos descubierto quien. Creo que Unique tiene todas las papeletas, pero
puede que nos sorprendan con la identidad misteriosa.
En cuanto a las canciones, esta semana hemos tenido sólo
tres; pocas para las que suele traernos Glee en cada capítulo. "Your
song" de Elton John, que se la ha cantado Ryder a la que él creía que era
su misteriosa chica y que obviamente no era. Después de que el chico se lleve
el palo de descubrir quien lo engañaba le recomendaría que se acordara de esta
chica, que es guapa y muy maja. "More than words", de Extreme,
hubiera sido una actuación muy chula si no hubiera sido porque estaba dedicada
a un gato llamado Lord Tubbington; momento rarito del capítulo.
"Say" de
John Mayer pone punto y final a un grandioso capítulo de esta temporada (y
van...). Y aunque muchos digan que Glee es una serie a la que se le pasó el
momento, este episodio demuestra que sigue dando momentos enormes; y podemos
decir que está en plena forma viendo esta cuarta temporada. Y todavía nos
quedan los últimos capítulos, que apuntan a ser espectaculares.